El CETIM y la UAWC presentaron una declaración en la que denuncian la represión y las violaciones sistemáticas de los derechos humanos cometidas por las fuerzas de ocupación israelíes y los grupos de colonos contra el campesinado palestino.
En julio de 2021, con motivo de la 47ª sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, el CETIM y la Unión de Comités de Trabajadores Agrícolas (UAWC por su sigla en inglés) -una organización campesina palestina que tiene como objetivo promover los derechos de los pequeños productores, la soberanía sobre los recursos naturales y la protección y defensa de los derechos de las y los campesinas.os- presentaron una declaración en la que denunciaban la represión y las violaciones sistemáticas de los derechos humanos cometidas por las fuerzas de ocupación israelíes y los grupos de colonos contra el campesinado palestino.
En Palestina, la agricultura es el sector económico más importante, aunque su contribución a la economía palestina ha ido disminuyendo a lo largo de los años. Esta reducción se debe a las políticas de ocupación israelíes, caracterizadas por la confiscación de tierras, restricciones de acceso y desplazamiento, daños a las infraestructuras, deforestación, acaparamiento de los recursos naturales (en particular del agua, etc.). Esta política pretende desmantelar el sector agrícola palestino y, específicamente, su capacidad de producción y comercialización, con el fin de neutralizar su capacidad de proporcionar alimentos adecuados a la población y sojuzgar a todo un pueblo.
En esta declaración, el CETIM y UAWC subrayaron que ya está ampliamente aceptado y demostrado que las políticas y prácticas de la ocupación israelí violan el derecho internacional de los derechos humanos y el internacional humanitario. De igual manera, se vulneran sistematicamente los derechos económicos, sociales, culturales, políticos y civiles, sin olvidar los derechos consagradas.os por la Declaración de la ONU sobre los derechos de las y los campesinas.os y otras personas que trabajan en las zonas rurales. Las prácticas de la ocupación representan una violación flagrante del derecho a la vida y a la autodeterminación de las y los campesinas.os, nómadas y pescadoras.es palestinas.os, reflejando un estado permanente de impunidad debido a la importancia estratégica de Israel en el ámbito internacional, que le permite disponer de un apoyo político incondicional de las principales potencias.
El 7 de julio de 2021, otra enésima incursión israelí tuvo como objetivo la sede de UAWC, causando graves daños. A continuación, las autoridades israelíes emitieron una orden de cierre de los locales. Este ataque forma parte de una estrategia de persecución contra esta organización campesina la cual molesta. En su declaración, La Vía Campesina – el mayor movimiento campesino internacional, del que UAWC es la rama en el territorio palestino – dice:
“El asalto y orden de clausura israelí son parte de una campaña planificada de difamación y desfinanciamiento no solo de UAWC, sino de la sociedad civil palestina en su conjunto. Su objetivo es neutralizar toda forma de organización pacífica del pueblo palestino. UAWC es una de las organizaciones más activas en Palestina y además encabeza la lucha por la Soberanía Alimentaria y Derechos Campesinos en la región árabe y del norte de África (ARNA). También coordina la articulación regional de procesos de movimientos campesinos de La Vía Campesina en la región. Por medio de su trabajo y a lo largo de las zonas rurales palestinas UAWC ha contribuido de manera valiosa y transformadora a las vidas de miles de pequeños agricultorxs, pescadorxs, pastoralistas y trabajadorxs agrícolas.”
El CETIM condena el intento israelí de desmantelar la organización campesina y solicita a los mecanismos de la ONU y a sus Estados miembros que hagan todo lo posible para que el gobierno israelí respete el derecho de asociación y la libertad de expresión de UAWC y ponga fin al uso de la violencia sistemática. El CETIM y UAWC continuarán utilizando los mecanismos de protección de los derechos humanos de la ONU para denunciar las violaciones de los derechos de los campesinas.os palestinas.os y exigir justicia por los crímenes israelíes.
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