En la Declaración del Milenario de las Naciones Unidas, en 2000, los Estados se comprometieron a reducir a la mitad la proporción de personas sin acceso al agua potable y al saneamiento, desde ese momento al 2015. Por tanto, el acceso al agua potable y al saneamiento debería ser una prioridad absoluta de la comunidad internacional. Sin embargo, cabe destacar que a pocos años del plazo y, a pesar de los esfuerzos realizados – entre los que figuran las proclamaciones del 22 de marzo “Día mundial del agua” (desde 1993), del Año internacional del agua dulce en 2003 y del Año internacional del saneamiento en 2008 – siguen siendo insuficientes. Si se mantiene la tendencia, no podrán alcanzarse en 2015 los objetivos del Milenario.
Para intentar invertir esta tendencia, algunas organizaciones de la sociedad civil apoyadas por diversos organismos de las Naciones Unidas y por varios Estados, han hecho de la promoción y de la protección del derecho al agua y al saneamiento una prioridad. Estos actores ejercen presión para obtener un mejor reconocimiento, una mejor definición y una mejor aplicación de estos derechos fundamentales, con la esperanza de que esta estrategia ayude a los sujetos de derecho y obligue a los Estados a rendir cuentas.
El objetivo de este cuaderno crítico es presentar los avances en la protección del derecho al agua y del derecho al saneamiento. En la primera parte, presentaremos la problemática del acceso al agua y al saneamiento en el mundo y describiremos los diferentes usos que compiten hoy en día (I). En la segunda parte, describiremos el reconocimiento y la definición del derecho al agua y del derecho al saneamiento a nivel internacional, regional y nacional (II). En la tercera parte, describiremos la posición de los diversos agentes sobre el derecho al agua y al saneamiento y haremos balance de las discusiones sobre estos derechos en las Naciones Unidas (III).