«Il n‘y a pas un monde développé et un monde sous-développé, mais un seul monde mal développé»
COMUNICADO DE PRENSA – La Via Campesina, CETIM, FIAN International
Bagnolet, Ginebra. En octubre de 2023, durante su 54º período de sesiones, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU adoptó la resolución 54/9, por la que se establece un nuevo Grupo de Trabajo sobre los Derechos de los Campesinos y otras Personas que Trabajan en las Zonas Rurales, integrado por cinco expertos de las cinco regiones de la ONU.
El 5 de abril de 2024, durante su 55º período de sesiones, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU nombró oficialmente a los cinco expertos (que fueron seleccionados entre 48 candidatos):
El inminente inicio de las actividades del Grupo de Trabajo marca un hito importante en el avance de la implementación de los derechos consagrados en la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Campesinos y Otras Personas que Trabajan en las Zonas Rurales (UNDROP). Este logro es de particular importancia para las organizaciones rurales que defienden sus derechos, incluidos lxs pequeñxs agricultorxs, las mujeres rurales, los ganaderxs, los pescadorxs artesanales, los trabajadorxs agrícolas sin tierra, lxs pastorxs, lxs trabajadorxs rurales, los nómadas y los pueblos indígenas.
Las comunidades rurales han soportado injusticias prolongadas en relación con la protección de los derechos y el acceso a los sistemas de seguridad social, exacerbadas por el predominio del sector agroindustrial en los sistemas alimentarios industriales. Esta dominación no solo los expone a una mayor vulnerabilidad a la explotación y la represión, sino que también obstruye sus derechos fundamentales –entre otros, su derecho a la tierra, a las semillas, a la soberanía alimentaria, a la biodiversidad, a los medios de producción– necesarios para avanzar hacia la autonomía en el trabajo digno. Además, el establecimiento del Grupo de Trabajo pone de relieve el compromiso de los Estados de salvaguardar los derechos de las personas y las comunidades rurales.
El recién nombrado Grupo de Trabajo es muy prometedor para la promoción y aplicación de los derechos de las comunidades rurales, ya que proporciona un apoyo crucial a sus iniciativas encaminadas a hacer efectivos esos derechos. Además, desempeñará un papel fundamental para los Estados, ofreciéndoles cooperación técnica, compartiendo ejemplos de buenas prácticas y proporcionando recomendaciones concretas sobre las mejores formas de hacer que sus acciones y marcos jurídicos nacionales cumplan con los principios y disposiciones de la UNDROP. Desde la adopción de la Declaración por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2018, algunos Estados han avanzado en la implementación de la UNDROP a nivel nacional. Sin embargo, ha habido una falta de supervisión institucional de su aplicación a nivel internacional. Además, las causas estructurales que condujeron a la adopción de la UNDROP, incluidas diversas formas de discriminación, violaciones sistemáticas de los derechos humanos y desventajas históricas, han persistido sin que se les preste la debida atención. A la luz de estos desafíos, el Grupo de Trabajo desempeñará un papel decisivo para facilitar la aplicación de la UNDROP. Identificará y promoverá las mejores prácticas y las lecciones aprendidas, fomentará la colaboración entre las autoridades de los Estados, los titulares de derechos y los expertxs de las Naciones Unidas, y proporcionará apoyo para la creación de capacidad técnica. De este modo, el Grupo de Trabajo pretende aumentar la importancia mundial de la UNDROP y abordar los problemas subyacentes que obstaculizan la realización de los derechos de las comunidades rurales.
¿Cuáles son los retos a los que se enfrenta el Grupo de Trabajo?
El principal reto al que se enfrenta el Grupo de Trabajo gira en torno a las limitaciones financieras, ya que los fondos disponibles para apoyar adecuadamente sus operaciones son limitados.
Además de los desafíos financieros, también existen desafíos operativos relacionados con el compromiso y la participación de las organizaciones campesinas y rurales. Estas organizaciones, en colaboración con sus aliadxs, deben apropiarse del nuevo mecanismo, reconocer y admitir su utilidad; difundirlo en las redes respectivas; ser capaz de explicar el procedimiento; y desarrollar estrategias para utilizarlo y alimentarlo. Esto requiere recursos, desarrollo de capacidades y esfuerzos de coordinación.
Además, puede haber problemas relacionados con la visibilidad, ya que las organizaciones campesinas y rurales deben estar preparadas para contribuir activamente a los esfuerzos del Grupo de Trabajo. Esto incluye deberes como la presentación de informes y quejas sobre violaciones y la participación de las autoridades estatales respectivas en los espacios habilitados.
Al hacerlo, esta participación puede ayudar a elevar la visibilidad de lxs campesinxs, que con frecuencia son marginados en la sociedad, fortalezcan su dignidad y fomenten aún más su participación en la gobernanza local, nacional y global.
Descargue la ficha informativa sobre el Grupo de Trabajo de la UNDROP para obtener más información sobre su mandato.
